Me sentí como si volviera a vivir la primera competición

El fin de semana del 16 y el 17 de octubre del 2021 quedará marcado para siempre en la memoria de la karateka Sandra Herver. Tras superar lesiones y problemas de salud, se pudo volver a ataviarse con el kimono y saltar al tatami para competir en lo que es su trabajo, su pasión, y en definitiva su vida: el karate.

Como se encuentra después de la primera competición?
Estoy muy bien, muy contenta, que el campeonato haya salido bien. De volver a verme allí compitiendo! Y ahora necesito un proceso de asimilar todo lo ocurrido durante la competición para poder analizarlo y tener un feedback para seguir mejorando. Pero una vez allí, me sentí como si volviera a vivir la primera competición, fue una sensación muy especial.

Y físicamente, como está?
Me he encontrado genial! Porto detrás un trabajo físico muy duro. Me hecho un muy buen trabajo con el preparador físico, y finalmente ha dado sus frutos. Me he encontrado como nunca! Yo no me había encontrado tan fuerte, como una moto.

Ahora que ya ha vuelto al tatami. Cómo vivió el proceso de recuperación?
Yo ahora lo pienso y tengo la sensación que ha ido todo muy deprisa. Pero, si me paro a pensar, es cierto que han sido tres años terriblemente duros. Desde la lesión en la muñeca que me viene compitiendo, pero una vez estoy recuperada, me viene la parada por el tema cardíaco y es como el jaque mate de mi vida. Se me para todo, se me para la vida! No sabía si saldría bien, y tenía una probabilidad de que ni siquiera saliera de quirófano. Y posterior sale todo bien, la operación va bien, la recuperación muy bien, yo no tenía ninguna sensación mala. Cuando empezamos a recuperar el nivel físico partes de menos diez. Es un poco como volver a aprender a caminar.

Cómo se afronta psicológicamente?
Es cierto que todo lo que llevas en avanzada no lo has perdido. No te has olvidado de luchar y entrenar, que al fin y al cabo es como montar en bicicleta. Pero a nivel físico no me podía levantar de la cama. Para mi caminar diez metros era un reto. Y eran objetivos super a corto plazo y que cada vez que hacía un era un pasito más. Tengo mi psicóloga detrás y hemos hecho un trabajo ejemplar y estoy sin ninguna secuela y estoy genial! Pero no ha sido una línea hacia arriba, son altos y bajos, y cuando estás arriba saber que has conseguido y abajo pues calmarte y pensar que el día siguiente irá mejor.

Y en medio de todo el proceso, llega la pandemia …
Sí, lo que faltaba! Me cogió a la mitad del proceso de recuperación. Llevaba casi seis meses, desde septiembre de 2019 y llega la Covidien y digo … esto que es … Yo incluso me lo tomaba a broma, decíamos con el equipo que parecía que alguien no quiera que devuelva a tatamis. Al final pero la Covidien nos ha parado la vida a todos, y la suerte mía es que en casa he podido continuar la preparación física y la parte de tatami. Por suerte, no tuve seis meses de paro, yo no podía parar! Necesitaba más! Y sabíamos que cuando pasas todo haríamos la subida. Al final habíamos esperado dos años, no venía de seis meses, y así hasta que volvimos.

El retorno comenzó por los training campos.
No tiene sentido ir a una competición de máximo nivel después de tanto tiempo parado. No es positivo psicológicamente. Lo hicimos progresivamente, primero dos training camp, de tipos diferentes, y hacer así una progresión de menos a más. Y la competición, que pensamos que era de medio alto nivel, y por lo tanto era una puesta a punto interesante porque estás de tu a tu con los que representan el país vecino donde yo represento Andorra. Fue un reencontrarme y competir y lo disfruté como si fuera la primera vez.

¿Qué sensaciones tuvo durante los combates?
Al no tener ritmo de competición, puedes entrenar muy bien, pero lo que te pone delante es la competición. Cometí un error, que me acompañó todo el campeonato, y hasta que no he revisado los vídeos no me he dado cuenta. Viajábamos con el objetivo de reencontrarme, pero es cierto que tanto el Xavi, que es mi entrenador, como el resto del equipo y yo misma, trabajamos para ganar. Somos ambiciosos, pero sabemos que no teníamos ritmo de competición. Soy consciente del error y por la siguiente el enmendar.

¿Cuál es el siguiente reto?
La siguiente competición es el campeonato absoluto de Madrid, que es en febrero. Es muy interesante porque la Comunidad de Madrid es la potencia del karate español. Y como estamos federados allí lo puedo hacer. Aquí he ido desde que soy cadete y lo he ganado varias veces. Tiene algo menos nivel que la Liga, pero para coger ritmo es muy interesante. Y de febrero a junio un campeonato cada mes.

Cuando comenzó usted a practicar el karate?
A los cuatro años y medio. Y todo fue porque mi padre es entrenador y yo siempre me miraba y quería entrar. He mamado el karate desde que he nacido, y como te decía, siempre quería entrar en el tatami, porque para mí era como un juego. Y yo veía a mi padre ya mi hermano allí, y yo también quería entrar! Me cuentan que desde muy pequeña ya daba vueltas por allí. Y a los cuatro y medio, fue cuando me abrieron la puerta para entrar. Y no he probado otros deportes, con el karate he encontrado mi sitio.

¿Qué piensa del momento actual del karate?
Creo que es un muy buen momento y los datos nos lo avalan. Hay mucha gente que se está sumando. Seguro que una parte es por el hecho de haber sido olímpicos, pero por la otra, no sé si es por la serie de Cobra Kai, que muchas personas están entrando en el karate. Y eso que no es exactamente karate, pero yo siempre les digo «ven y lo probamos!». Y creo que es justo vivir este buen momento. Somos un deporte minoritario, y antes de empezar Tokio sabíamos que en París ya no seríamos olímpicos, una situación que no se acaba de entender y menos viendo los resultados de los últimos Juegos Olímpicos.

Hablaba de Cobra Kai. Cree que las series y las películas ayudan a popularizar o crean falsos mitos?
Creo que las dos cosas. Porque es cierto que tanto Karate Kid como Cobra Kai no es exactamente karate. Pero está muy bien y amplían el abanico al público. Es cierto también que la idea de que tienes al entrar no es la correcta. Pero también está bien porque vienes y pruebas lo que realmente es, y normalmente te quedas. Con las artes marciales hay muchos mitos. Que si rompemos maderas, que si hacemos claves, y yo con la llave abro en casa. Pero al fin y al cabo, si se habla, es muy bueno.

¿Qué valores cree que aporta el karate?
La pregunta es compleja y amplia. El karate te aporta el respeto, el hecho de tratar de superarse, el ser leal, fortalecer el carácter y cultivar el autocontrol. Estos son los cinco preceptos básicos que enseñamos a los niños, el Dojo Kun. Pero cuando te quieres dedicar profesionalmente debes tener más. Para que una persona con talento no gana un mundial si detrás no hay disciplina, resiliencia, esfuerzo, aceptación de la derrota … y todo ello son valores que te sirven para la parte deportiva, pero que se aplican a la vida. Es una filosofía de vida, que va más allá de un deporte. Y aquí influye mucho el tipo de entrenador, si se limita a eso, o si es un maestro y te puedes transmitir todos estos valores. Y educar a través del deporte, aportando estos valores, es la clave.

Siempre se habla de que el karate sólo es un arte de defensa.
Exacto, en el karate, el ataque está prohibido, sólo está permitido el contraataque, cuando no tienes otra opción de escapar. Es sólo para defensa personal. Y por eso es muy importante diferenciar dentro del mundo del karate entre un competidor, un deportista y un karateka. Este último es el que lo engloba todo, porque al final tienes que ser karateka cuando llevas el kimono, pero también cuando te lo sacas.

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