Una veintena de pequeños han participado en el Trofeo de Navidad de Karate, en el Prat Gran de Escaldes-Engordany. La competición ha estado marcada por las numerosas bajas por confinamientos y positivos de las últimas horas.
El kárate ha vuelto a los tatamis del Prat Gran de Escaldes-Engordany con una nueva edición del Trofeo de Navidad. Una veintena de pequeños y pequeñas de 6 a 13 años han participado durante toda la mañana en la competición de Kata.
El torneo ha estado marcado por la poca participación, con un 50% menos de competidores, por culpa de los confinamientos y positivos de muchos participantes.
Concentración, pausa y agilidad. Tres preceptos básicos que los karatecas han plasmado bajo la atenta mirada de sus familias. Y es que muchos volvían al tatami después de muchos meses.
La competición se ha dividido por categorías y se ha realizado con mascarilla, pero esto no ha evitado que las ganas se hicieran presentes en todos los ejercicios.
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