Matías Gómez (22-7-1990. Bolaños de Calatrava) es uno de los grandes del karate español. Este sábado, en la edición impresa de La Tribuna, repasa el año 2017 y sus objetivos para 2018.
¿Qué balance hace del año que está a punto de terminar?
2017 es un año en el que he competido muchísimo y en 2018 lo haré aún más, ya que será necesario ir sumando puntos para el ranking mundial y estar muy bien preparado para cuando se abra la clasificación para los Juegos Olímpicos, que no sabemos aún cómo se va a articular.
2017 es un año en el que he competido muchísimo y en 2018 lo haré aún más, ya que será necesario ir sumando puntos para el ranking mundial y estar muy bien preparado para cuando se abra la clasificación para los Juegos Olímpicos, que no sabemos aún cómo se va a articular.
¿Con qué éxito se queda de este año?
Con la medalla de bronce de los Juegos Mundiales celebrados en Polonia. Son como unos Juegos Olímpicos pero de aquellas disciplinas que no son olímpicas. De esta forma, competimos ocho karatecas, los cinco campeones de cada continente más los tres mejores del mundo. Pude hacer podio ante gente de ese nivel y estoy muy contento.
¿Qué ha supuesto el anuncio de la inclusión del karate en el programa olímpico?
Ha sido un revulsivo. Se están organizando muchas más competiciones y tenemos más visibilidad.
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